A continuación presentamos diversos tipos de trabajos mágicos, los más comunes, que se realizan con la Santa Muerte. así como ciertas sugerencias de prácticas populares:
- Protección: Se busca resguardo ante peligros o malas influencias. Para ello se emplean velas blancas (o negras para protección total) y figura de Santa Muerte vestida de blanco. En un trabajo de protección se pide a la Santa Muerte amparo contra agresiones, envidia o ataques mágicos. Se suelen incluir ofrendas de sal, tierra consagrada o agua bendita sobre las velas, mientras se recita: “Santa Muerte, protégeme de todo mal y guía mis pasos con tu luz” (invocaciones propias del devoto). Al consumirse la vela en su totalidad se considera cumplida la petición. Muchas prácticas populares lo ven como un “escudo” familiar; en paralelo, en entornos más esotéricos se hacen limpiezas espirituales con vela blanca y brebajes protectores.
- Amor y relaciones: Orientado a atraer o fortalecer vínculos afectivos. Se utiliza la Santa Muerte de túnica roja (o rosa) y vela roja. Las ofrendas incluyen rosas rojas, azúcar o miel (para la dulzura), canela, claveles, e incluso fotos de la pareja. El ritual típico consiste en pedir “un amarre” o unión de amor (“Santa Muerte roja, une nuestros corazones en amor sincero…”). Según tradiciones folklóricas se pueden atar cordones rojos o nudos juntos entre objetos de los amantes. También existe la práctica de deshacer vínculos tóxicos encendiendo una vela roja mientras se pronuncian plegarias para “romper amores malos y atraer uno bueno”. Estos trabajos requieren paciencia (p. ej. novenas de 9 días) y fe en la intercesión de la figura. La Santa Muerte roja es la patrona de asuntos románticos.
- Dinero y prosperidad: Se busca mejorar la situación económica o laboral. Para estos ritos se emplea la Santa Muerte dorado (o verde) y velas doradas o verdes. Los devotos ofrecen monedas, billetes, semillas de maíz o granos (abundancia) y bebidas alcohólicas. En la petición se implora por empleo, éxito financiero o suerte en apuestas (“Santa Muerte dorada, ayúdame a prosperar en mi trabajo…”). Algunos escriben la cantidad deseada en papel y la queman junto con la vela, o colocan una imagen de la Santa Muerte sobre una alcancía. Estudios y testimonios populares confirman esta tradición: “Santa Muerte dorada significa abundancia y dinero”. Al finalizar el ritual suele agradecerse con un último vaso de bebida sobre el altar.
- Justicia: Dirigido a obtener equidad en trámites legales o enfrentar injusticias. Se emplea la Santa Muerte verde y vela verde. En ofrenda se incluye peso en cada mano de su balanza, u objetos que representen el caso (papeles legales, fotografías). En la oración se clama justicia divina: “Santa Muerte verde, levanta tu balanza por mí y defiende mi causa…”; es común invocar protección contra calumnias o violencia. Esta variante se pide incluso por parte de familias de fallecidos que buscan verdad o tribunales que cumplan justicia. El verde simboliza tanto la esperanza legal como la unión con seres queridos (según algunos devotos).
- Venganza y retribución: Para quienes desean castigo o alteración del destino de una persona que les ha ofendido. Aquí se usa la Santa Muerte negra (o roja, según el caso) y velas negras. En este tipo de trabajo se pide a la Santa Muerte hacer “pagar” al agraviador por su culpa. Las ofrendas pueden incluir objetos del acusado (una fotografía, un recado escrito con su nombre) junto con sal o clavos, entre otros elementos da. Se recitan invocaciones fuertes (“Santa Muerte negra, recoge las malas acciones de [nombre] y devuélvelas con justicia”). Esta práctica es polémica: en el folclore se reconoce su existencia, pero muchos devotos la consideran algo peligroso. No obstante, la Santa Muerte negra es popular para proteger a “quienes hacen justicia por mano propia”. En todo caso, los rituales de venganza suelen enfatizar el pedido de “justicia” y limpieza de maldiciones.
- Salud y sanación: Se enfoca en curar enfermedades o dolencias. Se utiliza la Santa Muerte de túnica morada (o blanca) y velas moradas. En ofrenda se ponen hierbas medicinales, agua bendita y alimento ligero. En la petición se ruega por la recuperación (“Santa Muerte morada, transmuta mi dolor en alivio y confórtame en mi enfermedad”). El morado se asocia con sanación y cambios profundos; algunos rituales incluyen limpiar el cuerpo del enfermo con una sábana blanca o ayudarlo a beber un preparado bendecido. Tras los días del ritual se agradece salud recuperada.
En todos estos trabajos mágicos es fundamental la intención clara y una fe férrea. El devoto debe meditar su petición antes de encender las velas, mantener la oración constante mientras dure la flama y finalmente dar las gracias al consumarse la vela. Cada petición tiene su simbología (color de vela, tipo de ofrenda, oración especial) para alinearse al objetivo. Lo único que se requiere es un espacio limpio, las herramientas rituales que consideremos necesarias y nuestra fe de que la Santísima Muerte acudirá a nosotros si nuestra petición es justa y apropiada.
